Ten cuidado, sin embargo, de que el examen de tus derechos no se convierta en una piedra de tropiezo para los débiles.El hombre debe cumplir su deber conyugal con su parienta, e igualmente la mujer con su cónyuge. La mujer ya no tiene derecho sobre su propio cuerpo, sino su consorte. Tampoco el hombre tiene derecho sobre su propio cuerpo, sino su